Finalmente y después de tres encuestas, Morena definió que el senador Armando Guadiana será su candidato a la gubernatura de Coahuila para las elecciones de junio próximo, donde ahora será el llamado Coordinador de los Comités de Defensa de ese partido, título otorgado a sus aspirantes a mandatarios para no ser considerados como actos de campaña anticipados.
Tras el legislador quedó en segundo lugar el expanista y exdiputado federal Luis Fernando Salazar y en tercero Ricardo Mejía, subsecretario de Seguridad y Protección Ciudadana, quien era el presunto favorito presidencial por sus constantes apariciones en las conferencias mañaneras y de inmediato reaccionó molesto y descalificó todo el proceso.
Sin embargo, interrogado sobre este asunto en su conferencia de este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador se deslindó totalmente y reiteró que el sistema de encuestas para elegir a los candidatos a gobernador, por ser la mejor forma de conocer la opinión de la ciudadanía.
Pero de no atenderse la inconformidad de Mejía podrían presentarse consecuencias negativas en las aspiraciones de Morena de poder sumar a Coahuila a los estados gobernados por Morena y de que el PRI, en alianza con el PAN y el PRD, pueda retenerlo.
Además, el senador Guadiana no resulta ser el mejor candidato por diversas razones, entre ellas que ha sido una figura cuestionable por involucrar sus actividades políticas con las de empresario minero, dedicado a la comercialización de carbón, siendo uno de los proveedores de la Comisión Federal de Electricidad.
Guadiana Tijerina nació en Múzquiz, Coahuila, en marzo de 1946, por lo que actualmente tiene 76 años de edad. Entre 1969 y 2012 fue militante del PRI, partido con el que fue electo como diputado local de 1973 a 1976, pero en 2017 se cambió a Morena desde 2017. En ese año intentó llegar a la gubernatura de su estado como candidato de Morena pero quedó en tercer lugar en las elecciones, donde triunfó el priista Miguel Riquelme.
Además, en las elecciones de 2021 se postuló como candidato a la alcaldía de Saltillo, pero también fue derrotado por el priista Manolo Jiménez, mismo que suena como el probable candidato de unidad con el cual volvería a enfrentarse en las urnas.
Resulta difícil que puedan llegar a un acuerdo y Mejía acepte el resultado de las encuestas, ante ello y como y se comentó, no habría alternancia política en Coahuila, lo cual de ninguna forma agradará al actual inquilino de Palacio Nacional.