En la opinion de: Miguel A. Rocha Valencia

¡Pobrecito!

Miguel A. Rocha Valencia

¡Pobrecito!
Agosto 10, 2023 14:21 hrs.
Política ›
Miguel A. Rocha Valencia › El Informador Analítico

· Nuevamente el ganso se victimiza y se dice blanco de violencia de género

Aquel que desde el púlpito presidencial ofende, estigmatiza, califica, condena y hace arder en la hoguera de sus mentiras y la persecución del Estado por el simple hecho de no creer en sus mentiras y en un país que vive otra realidad hoy se dice víctima como siempre y se dice objeto de violencia de género o que, pregunta ¿Eso es sólo para las mujeres?

Ese personaje que no acepta que su cuarta transformación resultó una de las peores tragedias para México que arrastra una sobre tasa de defunciones de más de 200 mil mexicanos por falta de atención médica y medicinas y que tiene al país en la mayor crisis de violencia de toda su historia y que se nutre de la miseria del pueblo como estrategia política para sostenerse en el poder casi llora y se dice víctima.

Si, el caudillo que dejó en el desamparo de salud a más de 50 millones de mexicanos, que dobla con chantajes y amenazas a sus ’rivales’, que llama corruptos a los de antes, a empresarios, a clase medieros aspiracionistas, científicos, intelectuales, periodistas, que cierra las puertas de Palacio Nacional a las mujeres agredidas, a madres de desaparecidos, madres buscadoras, niños con cáncer, víctimas de masacres, dice que él es una víctima.

Pero al mismos tiempo, sin abandonar su posición soberbia amenaza y advierte que irá, con todo el peso contra quien se atrevió a conceder un amparo a favor de Xóchitl Gálvez quien le reclamó la violencia que durante varias semanas desató contra ella desde la silla presidencial, olvidando él mismo que dejó de ser el primer mandatario de todos los mexicanos para convertirse en un delincuente que viola consuetudinariamente la Constitución que protestó cumplir y hacer cumplir y es capaz de utilizar a las instituciones como la UIF o el SAT o la mismo a Fiscalía General de la República para difamar, perseguir y si es posible, encarcelar a sus rivales, a quien le estorba y no se somete.

Es el ganso quien como plañidera preguntó que todo lo que se dice de él no es violencia de género, desviando la atención de que a quien busca proteger la ley es precisamente a las mujeres secularmente violentadas e ignoradas, como esas a las que se niega a recibir a cambio de una abuela de la plaza de Mayo, y que le piden ayuda para encontrar a sus hijos desaparecidos por el crimen organizado que él mismo protege con políticas tan fallidas que ya se cuentan 161 mil asesinatos en su administración.

Como siempre desde hace más de 20 años, el hijo predilecto de Macuspana se victimiza, se dice el objeto de toda violencia cuando es él el epicentro de lo que sucede en el país donde el terror, la intimidación se volvieron el sello característico. Desde palacio contra todo rival y en México el crimen contra la ciudadanía.

Es la divisa de este sexenio, la violencia esa que se engendra en las entrañas de un solo sujeto que ante los grandes problemas nacionales, oculta la cara, acusa a los de antes y que es incapaz de aceptar una sola de sus responsabilidades no sólo como titular del Ejecutivo, sino como varón pues sus pleitos los hace con ventaja desde el poder presidencial, con todo el Estado a su espalda incluyendo las instituciones para cebarse en sus adversarios, en este caso una mujeres a quien por lo visto intentará destruir porque ya se le volvió un estorbo, un peligro real no sólo para él sino para sus corcholatas incapaces de sostenerse a sí mismas, en especial la que se dice científica y resultó un clon de Tepetitán.

¡Pobrecito! dirán sus seguidores a quien como plañidera casi llora para justificar la rabia que apenas pude contener, sus ansias de revancha contra una mujer de extracción indígena que representa todo lo que no es él, pues esta si estudió creció con su esfuerzo y tiene una familia que trabaja y no vive como la suya, del poder.

La violencia va a continuar, el pobrecito peje no mide, su rencor y enojo lo ahogan y seguramente lo harán que se asfixie. Veremos si la senadora-empresaria resiste.

Ver más


Escríbe al autor

Escribe un comentario directo al autor

Suscríbete

Recibe en tu correo la información más relevante una vez al mes y las noticias más impactantes al momento.

Recibe solo las noticias más impactantes en el momento preciso.


¡Pobrecito!

Éste sitio web usa cookies con fines publicitarios, si permanece aquí acepta su uso. Puede leer más sobre el uso de cookies en nuestra política de uso de cookies.